La sociedad está cambiando. La concienciación sobre el medio ambiente cada vez es mayor, por lo que el número de particulares y empresas que se encuentran tomando medidas en pro del planeta va en aumento. Las administraciones públicas y gobiernos también se encuentran trabajando en aras de una transición ecológica real.
En este sentido, muchas de las comunidades de vecinos están optando por llevar a cabo la instalación de paneles solares fotovoltaicos en las azoteas, creando de esta forma comunidades energéticas que, además de mejorar el Medio Ambiente, consiguen reducir considerablemente el coste de sus facturas.
Ahora bien, todavía queda mucho camino por delante para conseguir una normalización de la situación y un mayor apoyo por parte de las entidades locales y gobiernos. A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber para instalar un sistema de energía solar en comunidades de vecinos o, lo que es lo mismo, una instalación de placas solares en comunidades de vecinos. Sigue leyendo para más información.
¿Qué es una comunidad energética?
Una comunidad energética viene a ser, prácticamente, la forma en la que se denomina a las comunidades de vecinos que deciden llevar a cabo la instalación de placas solares en sus edificios. Debido a que el concepto de comunidad energética en España todavía presenta algunas deficiencias, podemos referirnos a ellas tal como lo hacen las organizaciones europeas. Estas comunidades tienen como fin la creación de valor en términos sociales y medioambientales, por un lado, y por otro, buscar el beneficio social más allá de la rentabilidad financiera. Se trata de un enfoque más centrado en la concienciación medioambiental.
Las comunidades energéticas pueden adaptar un edificio de manera que sea capaz de generar su propia energía con el fin de suministrarla al total de viviendas de la comunidad, así como a los servicios de la comunidad —como puede ser la luz de las escaleras, el ascensor…—.
Energía solar y comunidad de vecinos ¿Está permitida?
La energía solar para comunidades es algo que todavía sigue muy verde en el país, por lo que no en todas las azoteas es posible llevar a cabo la instalación de placas solares en comunidades. Los principales impedimentos tienen que ver con problemas de espacio, así como con problemas de ubicación. Ahora bien, la ley marca un total de 3 vías gracias a las cuales es posible llevar a cabo instalaciones de energía solar en comunidades de vecinos, dependiendo de cada caso. Estas son:
- Azoteas de edificios residenciales: Son los casos en los que no existen problemas de espacio ni de ubicación —cuando los rayos solares inciden perpendicularmente sobre los paneles solares la mayor parte del tiempo—. En estas azoteas es posible llevar a cabo la instalación de placas solares en comunidades de vecinos.
- Azoteas de edificios contiguos: En los casos en los que no es posible realizar la instalación solar fotovoltaica en el propio edificio, la ley permite formar una comunidad energética con los edificios contiguos siempre y cuando el radio no sea superior a 500 m. Por supuesto, con el acuerdo mutuo de los vecinos.
- Compartir referencia catastral: Otra posibilidad para aprovechar la energía solar en comunidades de vecinos ajenas es cuando estas comparten, al menos, 14 dígitos de la referencia catastral.
Es importante saber, así mismo, que este tipo de instalaciones son consideradas como obras menores, por lo que no resulta imprescindible contar con las tres quintas partes de los propietarios para su aprobación, tal como se refleja en el artículo 17 de la Ley de Propiedad Horizontal.
Placas solares y comunidad de vecinos ¿Cómo llevar a cabo la instalación?
En caso de que tu edificio residencial reúna las condiciones necesarias para llevar a cabo la instalación de un sistema de energía solar para comunidades se deben seguir unos pasos concretos con el fin de evitar problemas, malentendidos y discusiones con los vecinos. Estos pasos son los siguientes:
Realizar un estudio de viabilidad del proyecto
El estudio sirve para determinar los perfiles de los vecinos que van a participar en la instalación de las placas solares en comunidades, así como sus consumos y la potencia que tienen contratada con la compañía eléctrica actual. A continuación, se calculará la cantidad de energía que deben producir los paneles solares fotovoltaicos para que la inversión sea rentable para todos los interesados y, por supuesto, la superficie del tejado u azotea para comprobar la cantidad de placas solares que pueden instalarse —y si cubren con las necesidades de la comunidad según el estudio—.
Las condiciones de consumo de energía solar para comunidades
Una vez realizado el estudio de viabilidad y comprobada la cantidad de placas solares en comunidades que son necesarias se debe redactar un acuerdo en el cual los propietarios de cada propiedad se comprometen a hacer un uso responsable de la energía. Este acuerdo debe reflejar cómo se va a utilizar la energía y de qué manera se va a repartir. El acuerdo debe contemplar, además, cuál será la cantidad de energía destinada para el uso de los servicios comunitarios, como el ascensor, así como lo que ocurrirá con la energía sobrante y de qué manera se reparte. Otro aspecto a tener en cuenta, así mismo, es la posibilidad de desviar energía en situaciones especiales. Por ejemplo, si una vivienda permanece un tiempo vacía y se quiere ceder la energía correspondiente de una propiedad a otra.
Monitorización de energía solar y comunidades de vecinos
Como es obvio, será muy recomendado llevar a cabo la instalación de contadores paralelos a los de la compañía eléctrica general para monitorizar la eficiencia energética en cada vivienda, pero también para controlar el reparto equitativo entre cada propietario. Se recomienda que se realicen informes periódicos. Así mismo, será imprescindible llevar a cabo un mantenimiento y supervisión periódica de las instalaciones.
Es importante tener en cuenta que la factura de la luz se reducirá considerablemente, ahora bien, los gastos no desaparecerán por completo ya que existen unos gastos fijos por cada compañía que varían dependiendo de la potencia contratada, los costes de mantenimiento… Lo recomendado será reducir la potencia contratada a los niveles mínimos para aprovechar la energía solar en comunidades de vecinos generada.